Sin duda una Feria de las Vanidades (más que hoguera woolfiana), feria al fín. Vanity Fair es en la consideración de los mejores publicistas americanos, el soporte ideal para un público objetivo con el más alto nivel adquisitivo. Una soberbia publicidad de grandes marcas inundan las páginas de esta revista que impone tendencias y crea opinión. Aquí la publicidad forma parte de la revista en una simbiosis envidiable.(Que aprendan los medios que utilizan la publicidad como un puro combustible) Un auténtico lujo de exclusivas de celebrities mundiales, artículos de investigación curiosos, los increíbles montajes de Annie Leibovitz, junto con los mejores fotógrafos, ilustradores, críticos. periodistas, en un producto siempre perfecto, cuidado hasta en los más pequeños detalles, desde la maquetación que optimiza el espacio de forma prodigiosa - hay que verlo- hasta la elección del papel o la fotomecánica sin un sólo quiebro. No, no es una revista donde se discuta lo semiótico o el diseño como una disciplina. No hay branding pero hay brandy y champán francés para beberse el mundo. Vanitas Vanitates... money is power.
www.vanityfair.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario